jueves, 20 de diciembre de 2012

SOLOMILLO DE CERDO IBÉRICO EN SALSA AL PEDRO XIMÉNEZ


Ingredientes:


2 solomillos de cerdo grandes
1 cebolla grande (250-300 gramos)
250 ml  de caldo de pollo o de verduras
125 ml de vino Pedro Ximénez
5 c/s de pasas de moscatel (80 gr)
1 c/s de harina de trigo
Aceite de oliva
Sal y pimienta negra


Preparación paso a paso de los solomillos:

Pela la cebolla y córtala en juliana (en tiras finas). Ponlas a fuego medio con 8 cucharadas de aceite en una cacerola o sartén grande (deben caber después los solomillos y la salsa). 

Deja que se "pochen" (que se pongan transparentes) y si ves que se te queman baja el fuego y si es necesario añade una cucharada de agua. 
Aparte, pon las pasas en remojo en un vaso con agua y resérvalas.
Coge los solomillos de cerdo y salpiméntalos  por dos lados. En una sartén grande pon tres o cuatro cucharadas de aceite y sella los solomillos a fuego fuerte para que se doren por todos los lados. 

Reserva la carne y deja la sartén en el fuego.

Coge Pedro Ximénez y viértelo sobre la sartén donde has sellado los solomillos (cuidado por si te salta). Con una cuchara de palo (o una espátula de madera) remueve el vino por la sartén rascando bien el fondo. Apaga el fuego y reserva la sartén con el vino. Lo usaremos en un momento.
A estas alturas la cebolla debe estar bien pochada (transparente). Añade a las cebollas una cucharada de harina de trigo y remueve bien (cuidado que no se pegue la harina al fondo) durante unos segundos para que la harina tome color y no se quede cruda.
A continuación vuelca sobre las cebollas el vino Pedro Ximénez de la sartén (habrá cogido toda la esencia de la carne doradita).
Remueve durante un minuto, añade los solomillos y el caldo de pollo caliente. Si no tienes caldo casero usa una pastilla de concentrado con medio litro de agua. Escurre las pasas y añádelas a la salsa. 
Deja a fuego fuerte que hierva la salsa hasta que espese a tu gusto. En una media hora habrá alcanzado una textura cremosa. Acompaña la carne con la salsa bien caliente y si te apetece puedes acompañarla simultáneamente con un puré de patatas cremoso y ligero para compensar la salsa del vino.

Ya tienes listo tu solomillo con salsa al Pedro Ximenez. 

miércoles, 5 de diciembre de 2012

TARTA DE CHOCOLATE Y FRAMBUESA


Ingredientes:



18 c/s de harina
18 c/s de azúcar
6 c/s de cacao puro en polvo
5 huevos
18 c/s de leche
6 c/s de aceite de girasol
1/2 sobre de levadura Royal
Una pizca de esencia de vainilla.

Para el relleno:

200 gr de queso mascarpone
6 c/s de azúcar glas
Mermelada de Frambuesa (cantidad al gusto).



Para la cobertura:


200 gramos de chocolate fondant
70 gramos de mantequilla
Sprinkles de lo que más te guste




 Elaboración de la TARTA paso a paso:


Coge un bol hondo y mezcla poco a poco, y sin dejar de batir con las varillas, el azúcar y el aceite.
Cuando hayas obtenido una pasta cremosa, añades los 5 huevos y vuelves a batir bien.
Añades después, también poco a poco y sin dejar de mezclar, el cacao en polvo, la leche y por último la harina (a la que le habremos añadido antes la levadura y una pizca de sal). 
Engrasa con mantequilla el interior del molde del horno en el que vas a hacer tu bizcocho, lo espolvoreas de harina y echa en él el contenido del bol con la masa que has preparado antes. 



Mete al horno a calor moderado (175-180º) unos 30 minutos aproximadamente.
Revísalo cada cierto tiempo para evitar que se te queme.
Cuando el bizcocho lo veas cocido y doradito, lo sacas del horno, lo dejas fuera y lo reservas hasta que esté frío para cortarlo.
Prepara mientras el relleno de la tarta, con el mascarpone, el azúcar glas y algún licor que tengas a mano (a ser posible Licor 43). Mézclalo todo bien hasta que te quede una masa densa y homogénea y reserva.



Con la salsa de frambuesas, haz lo mismo, mézclala bien en otro recipiente aparte y reserva también.
Cuando el bizcocho esté bien frío, ábrelo por la mitad con  un cuchillo que corte bien y cubre la base con el mascarpone (puedes mojar el bizcocho con algún licor si lo deseas), a continuación cubre con la mermelada y coloca la parte superior del bizcocho.








Funde en el microondas o al baño maría el chocolate con la mantequilla, si lo haces en el microondas recuerda darle tiempos cortos, no más de un minuto la primera vez, cuando esté a medio fundir, bate con una espátula para que el calor termine de fundir el chocolate, obteniendo una crema de chocolate ligera.











Viértela sobre el bizcocho dejando caer las gotas por todo su contorno y termina decorando con unas avellanas tostadas y caramelizadas, unos fideos de chocolate, unas perlas de azúcar…a tu gusto.




BUEN PROVECHO !!!!

jueves, 29 de noviembre de 2012

TARTA DE ZANAHORIA


La tarta de zanahorias es todo un clásico dentro de la repostería que sigue manteniendo su popularidad como el primer día, y que siempre está de moda a pesar de ser una tarta con muchos años de tradición.
Este pastel se elaboraba ya en la Edad Medía y la inclusión de las zanahorias se produce debido a la falta de posibilidades que tenían los hogares de encontrar azúcar y que unido al elevado precio de esta obligaban a buscar un producto alternativo que endulzara sus pasteles, por lo que la zanahoria, al contener más azúcar que otros vegetales, se convirtió en la base principal de sus ingredientes. El pastel toma su auge en la II Guerra Mundial debido al racionamiento que sufría Gran Bretaña, la zanahoria al no encontrarse racionada formó parte importante de la repostería del momento y popularizó el clásico "Carrot Cake" que hoy conocemos.
Esta tarta de color anaranjado tiene una suave y densa textura, más acentuada que un pastel normal debido a la inclusión de la zanahoria, no creáis que sabe a zanahorias, no, pero si le aporta una textura inigualable al pastel, así como un punto crujiente producido por las nueces que se le añaden a la masa del bizcocho.
Como siempre el frosting juega a favor de él, aquí no es tan popular pero si realmente lo queréis probar en todo su esplendor mi consejo es que lo hagáis, si no os gusta nada de nada, con quitarlo es suficiente, pero insisto, nada que ver sin él.
Es un pastel húmedo y jugoso, de sabor inigualable, un sólo bocado de esta deliciosa tarta os dirá por qué se ha convertido en todo un clásico y por qué sigue siendo todo un referente.

INGREDIENTES:

100 g de nueces
340 g de zanahorias
100 g harina de repostería
180 g harina integral
4 huevos (yo los he puesto "de corral")
200 g azúcar
100 g azúcar moreno
240 ml. de aceite de girasol (o de oliva suave)
1 c/p de bicarbonato
1 sobre de levadura Royal
1/2 c/p de sal
2 c/p de canela
1 c/p de esencia de vainilla

Frosting:



300 g queso crema tipo Philadelphia
200 g azúcar glas
50 g de mantequilla
200 ml. nata Líquida
1 c/p de esencia de vainilla (opcional)
Un "chorreón" de Cointreau



PREPARACIÓN DE LA TARTA PASO A PASO:


En la Thermomix o en cualquier otro procesador de alimentos tritura las zanahorias hasta dejarlas muy picaditas, deben de quedar unos trozos pequeños.  Resérvalas.
Con las nueces, haces lo mismo en la Th o como quieras, las trituras hasta dejarlas picadas en trozos pequeños.
En un bol, pones la harina, el bicarbonato, la levadura, la sal y la canela para integrar todos los ingredientes y que nos quede una mezcla homogénea.

En otro bol, mezclas los huevos junto con el azúcar hasta que quede una masa blanca y espumosa, luego añades el aceite y la esencia de vainilla y sigues batiendo hasta obtener una mezcla homogénea y ligera.
Después, mezcla los ingredientes líquidos con los secos hasta conseguir una masa ligera, a continuación añade la zanahoria, las nueces y los mezclas hasta integrarlos en la masa.

Vierte la masa en dos moldes engrasados de 23 cm cada uno (esto es opcional, también puedes hacerlo en un único molde y cortar luego el bizcocho por la mitad), lo introduces en el horno, ya precalentado a 180º y lo dejas cocer 30 minutos  aproximadamente o hasta que pinches y veas que la aguja sale limpia.

En el caso de que lo hagas en un solo molde, debe cocer casi 60 minutos, de todas maneras, controla la masa de vez en cuando pinchándola.


Mientras tienes el bizcocho en el horno prepara tu frosting, pon en un bol la mantequilla y el queso crema (a temperatura ambiente) y lo vas batiendo con unas varillas hasta conseguir que te quede casi montado, continua añadiéndole el azúcar y el extracto de vainilla hasta que te quede una mezcla uniforme y sin grumos, luego añades en varias tandas la nata que habrás montado previamente y la vas incorporando a la masa de forma suave y con unas varillas.




Saca el bizcocho del horno y lo dejas enfriar. Una vez frío, pones una base de bizcocho, otra de frosting y nuevamente otra capa de bizcocho, cubre la tarta con el frosting y déjala en la nevera por espacio de 1-3 horas antes de servirla, así el frosting habrá cogido consistencia y frescura.




Que la disfrutéis!!!